Acantilado

- Vale…
Lo miro un momento y rodó los ojos.
- No nada, de un momento a otro me dio un poco de vergüenza.
Estiro la mano y tomo un racimo de uvas, tomando una se la llevo a la boca.
- Quieres?
Estiro su mano acercándole una uva a Jaden.

- ¿Por qué?
Se estiró un poco y atrapó la uva entre sus labios.
- Gracias.

- Yo que se, estoy mal de la cabeza.
Lo miro.
- Osea yo tener vergüenza contigo, a lo mejor y me golpee la cabeza con alguna roca o algo así.

Se echó sobre la mesa, mirándola con los ojos entrecerrados.
- No entiendo porque tienes verguenza conmgo...
¿O era algo por lo aue él había hecho sin darse cuenta?

- Ya te dije, solo me dio vergüenza de un momento a otro y ya paso.
Le contuvo la mirada.
- No hiciste nada.
No había hecho nada, solo que estaba comiendo con Jaden y se estaban tratando bien eso era sorprendente.
- Anda toma otra uva.
Le acerco otra uva.

Dejó el tema, lo estaban pasando bien, estaban comiendo y punto, no pasaba nada.
Esta vez mordisqueó la punta de sus dedos sin querer al coger la uva.

Se estremeció.
- Te has equivocado de uva.
Tomo otra y se la llevo a la boca.
- Y que has hecho Jaden, ha por cierto vendí tus fotos por internet y ya me compre mi estatua de oro.

Casi se atraganta con la uva cuando la escucha decir eso.
- Es un broma ¿No?...

Se mordió el labio para no reírse de la cara que había puesto.
- No, no estoy de broma.
No había subido nada, pero quería ver que cara ponía.
- Me dijeron que si cuando te podría tomar algunas más.

Se le tuvo que cambiar el color de piel una y otra vez....
- No, eso no es verdad....

Trago saliva al ver como cambiaba de color su piel.
- Era broma, no e subido nada, tus fotos están guardadas muy bien donde nadie puede encontrarlas.
Hasta en ocasiones se le olvidaba donde estaba su escondite.
- Así que relájate, y toma otra uva.
Le acerco otra uva.

Gruñó, así que una broma, ya se las haría pagar.
- Te voy a dar una buena zurra Sele...
Le dijo antes de coger la uva de nuevo pero con la lengua.

- Huy! que miedo que te tengo.
Bueno… si le tenia miedo, solo un poco pero no le haría nada malo o si?
- Pero si jugaba, que mal que te pones. Aunque te miras bien de todos colores.

- Eso es un cumplido?
Alzó una ceja, cogiendo una tostada y la untó de paté y mermelada, se manchó el dedo de paté cuando iba a chuparselo pero se lo dio a ella para que se lo chupara.

- No
Dijo tan sincera que no pudo aguantarse las ganas de reír cuando miro su cara.
- Claro que es un cumplido.
Miro su dedo.
- Pero tiene microbios de demonio, que tal si me convierto en uno de los tuyos?

- Vaya... uno puede acostumbrarse a eso.
Encogió un hombro y se llevó el dedo hasta su propia boca, chupandolo.
- No tenía nada solo un poco de paté, si fuera mi sangre la cosa sería distinta... ¿Tan malos somos los demonios?
Y más cuando el no era ni demonio si quiera.

- A que cosa?
Tomo otra uva y se la llevo a la boca. Comenzó a negar con la cabeza.
- Ya se que no tiene nada de malo, solo estaba jugando para ver que decías.
Tomo otra uva.
- Y para nada son malos solo conozco unos cuantos y no son nada malos hasta tengo una amiga que es demonio.

- Sabes que no me gusta que me rechacen...
Bastante lo habían rechazado ya, no quería más de eso, podía pasar..
- Y no se diferenciar entre una broma y cuando me rechazan.

- Si eso si lo se.
Suspiro.
- Lo siento, no lo volveré a hacer.
Ya no volvería a bromear con el.
Estiro su mano y tomo la de el apretándola un poco.

Era un gi*poll*as.
- Puedes bromear tantas veces quieras... De verdad.

- Vale… Pero te avisare cuando sea una broma o cuando no lo sea.
Le sonrío y le quito la tostada de la mano.
- A gracias.
Comenzó a comérsela como si nada.

- Eso era mio!
Aunque se lo dijo riendose y ella no le hizo demasiado caso.
- Esta bien, pero tienes que avisarme o te zurrare.

Ni hablo hasta que termino de comérselo.
- Era tuyo ya no lo es. Ya te preparo uno para ti, para que no digas que soy mala.
Comenzó a preparar una tostada para el.
- Huy!, que miedo que te tengo.
Hizo como si temblara por el miedo.

- Eso es porque aun no te he zurrado...
La vio como le preparaba la tostada, mientras el llenaba las copas con cava.
- ¿Vas a darmela también?

- Si, si como digas Jadi.
Termino la tostada y se la acerco. Alzo una ceja.
- Que?, en la boca?